¿Qué pretendemos conseguir?.
Cada uno de nosotros somos diferentes. En clase, en nuestra aula debemos comprender que la personalidad de cada uno, sus valores, su entorno y su contexto nos hacen actuar de una determinada forma. No obstante, todos somos iguales ante la ley y la justicia. Por ello, existen unas normas que debemos cumplir, eso sí desde la diversidad y desde una escuela inclusiva es más fácil entenderlas y respetarlas.
Con esta actividad pretendemos que el alumnado experimente cómo se siente con los zapatos de otro compañero o compañera. La norma en el aula es que todos llevemos calzado, pero obviamente, se van a originar problemas cuando se pongan los zapatos de los compañeros porque les vendrán grandes, pequeños, etc. El objetivo es experimentar con una norma igual para todos y ver qué ocurre con la idiosincrasia de cada uno.