Saltar la navegación

Conceptos clave y glosario

  • Pena de muerte: la pena de muerte, pena capital o ejecución consiste en provocar la muerte a un condenado por parte del Estado, como castigo por la comisión de un delito establecido en la legislación. Los delitos por los cuales se aplica esta sanción suelen denominarse “delitos capitales”. Podía decirse que la pena de muerte tiene sus orígenes en la Ley del Talión (“ojo por ojo, diente por diente”) recogida en el Código de Hammurabi, en el s XVIII a.C.
  • Tortura: según la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.

“(...) se entenderá por el término ‘tortura’ todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o se sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos dolores o sufrimientos sean infligidos por un funcionario público u otra persona en el ejercicio de funciones públicas, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia (…) ”

  • Eutanasia: etimológicamente, buena muerte. Hace referencia en nuestra cultura occidental a la reivindicación por algunos sectores del derecho a una muerte digna frente al sostenimiento artificial de la vida y que implica el auxilio activo de otra persona.
  • Nasciturus: es un término jurídico que designa al ser humano desde que es concebido hasta su nacimiento. Hace referencia, por tanto, al concebido y no nacido. Es una personalidad jurídica controvertida.
  • Persona: sustancia individual de carácter racional y libre (BOECIO). Hace referencia a la singularidad de la vida humana frente a la naturaleza genérica propia de la especie homo sapiens sapiens.
  • Aborto: (Fuente WIKIPEDIA): el aborto (del latín abortus) es la interrupción y finalización prematura del embarazo de forma natural o voluntaria, hecha antes que el feto pueda sobrevivir fuera del útero.  Un aborto que ocurre espontáneamente también se conoce como aborto espontáneo. Cuando se toman medidas deliberadas para interrumpir un embarazo, se llama aborto inducido.
  • Integridad moral: la integridad moral puede definirse como una cualidad de la persona que la faculta para tomar decisiones sobre su comportamiento por sí misma. Se predica de todos los individuos en cuanto tales. Está muy relacionada con la concepción del sujeto de sí mismo: sus comportamientos, creencias y forma de actuar.

El Tribunal Supremo español define la integridad moral como "un atributo de la persona, como ente dotado de dignidad por el solo hecho de serlo, esto es, como sujeto moral, fin en sí mismo, investido de la capacidad para decidir responsablemente sobre el propio comportamiento". Asegura, además, que la garantía constitucional de la dignidad, como valor de la calidad indicada, implica la proscripción de cualquier uso instrumental de un sujeto y la imposición al mismo de algún menoscabo que no responda a fin constitucionalmente legítimo y legalmente previsto.

Todas las constituciones democráticas modernas recogen el derecho fundamental a la integridad moral.

  • Vida: conjunto de las funciones que resisten a la muerte. El concepto de vida es ambiguo y puede definirse desde diversos enfoques. La noción más habitual está vinculada a la biología. No en vano el término castellano proviene del latino vita, que a su vez deriva del griego bios.

En biología, se considera la condición interna esencial que define, tanto por sus semejanzas como diferencias, a los seres vivos. En general, es el estado intermedio entre el nacimiento y la muerte. Desde un punto de vista bioquímico, la vida puede definirse como un estado o carácter especial de la materia alcanzado por estructuras moleculares específicas, con capacidad para desarrollarse, mantenerse en un ambiente, reconocer y responder a estímulos y reproducirse permitiendo la continuidad.

Las estructuras de vida biomoleculares establecen un rango de estabilidad que permite que la vida sea continuada, dinámica y finalmente evolutiva. Así pues, los seres vivos se distinguen de los seres inertes por un conjunto de características, siendo las más importantes la organización molecular, la reproducción, la evolución y el manejo no espontáneo de su energía interna.